CRITERIOS PARA LA ELABORACIÓN  Y USO DE LAS ESCALAS DE CALIFICACIÓN

 

1º)  Las características a evaluar deben ser significativas e importantes en el marco del aprendizaje.

2º)  Los rasgos y características deben ser directamente observables. Evita, por tanto, las cuestiones abstractas, ambiguas y subjetivas.

2º) Los ítems o preguntas deben ser unívocos, es decir, no deben tener varias interpretaciones. Es necesario definirlos con claridad y evitar términos que admitan varias interpretaciones (frecuentemente no hay concordancia entre distintos/as evaluadores/as cuando se trata de precisar el significado de vocablos como “rara vez”, “ocasionalmente”, etcétera; es preciso describirlos operativamente para conseguir mayor objetividad y precisión).

3º)  Siempre que sea posible, se aconseja que apliquen la escala varios/as evaluadores/as expertos/as en la materia.  De esta forma se reduce la subjetividad y los prejuicios tienden a equilibrarse. Estos/as evaluadores/as deberán trabajar independientemente para no influirse entre ellos/as.

4º) El número de categorías de la escala debe oscilar entre 3 y 7, para evitar apreciaciones burdas o muy sutiles.

PRACTICAS